En la clasificación de los residuos sólidos se distinguen los siguientes grupos:
Residuos sólidos orgánicos
Son todos aquellos residuos que, con la presencia de la humedad, tienen un efecto de putrefacción.
Son de cualquier naturaleza que se pueda descomponer por procesos naturales dentro de un periodo razonable de tiempo, son los restos de la preparación de los alimentos, restos de comida, desechos de mercado, animales muertos, hojas de plantas, etc.
Residuos sólidos inorgánicos
Este tipo de residuos son los que no se degradan o descomponen con el pasar del tiempo, pero pueden ser reciclados para su reutilización.
Residuos sólidos domésticos
Son aquéllos que son generados día a día en las residencias. Se incluyen bajo esta denominación:
- Los desperdicios de la alimentación y consumo doméstico (compuestos generalmente por restos de alimentos, cáscaras de hortalizas y frutas. Por productos deteriorados como: papeles, botellas de vidrio, latas de conservas, bolsas de plástico, papel higiénico, toallas higiénicas, pañales desechables, etc.)
- Los desechos resultantes de la limpieza de las viviendas, oficinas, edificaciones públicas y privadas, de establecimientos comerciales e industriales, etc.
- El producto del barrido de aceras.
- El escombro procedente de pequeñas reparaciones y el producto de la poda de plantas.
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